MARATHON DE BUENOS AIRES : CERRANDO CICLOS

Cada día que pasa me acerca mas y mas a mi gran objetivo para este año, correr el maratón, y es casi seguro que los que vamos a intentar hacer esta distancia ya la están o la estamos viviendo, muchos de nuestros pensamientos deben estar pensando en cómo dosificar, en cómo evitar extremar nuestras fuerzas, en que kilómetros debo ingerir líquidos o power gel, que pasara después del kilómetro 25, del 30 y cuando este en el 35 … me alcanzaran las fuerzas para llegar, como cobra importancia escuchar a los que han hecho la distancia más de una vez, aun así, la motivación esta muy alta , quizás el tema sea no hacerse mas expectativas que el llegar y como los senior dicen "llegar bien". Es tal vez único consejo que nos entregan a los primerizos.

Por cierto que los mas avezados estarán pensando: que no solo basta en llegar sino en el tiempo que haré para llegar, otros como el suscrito solo pensamos en llegar más allá del tiempo que podamos hacer, aun cuando debo reconocer que igualmente esta es una preocupación. En estas semanas seguramente iran aflorando todos nuestros temores, nuestras inseguridades, nuestras debilidades. En lo personal siempre he creído que esta prueba mas allá de la distancia en de inteligencia; veamos : Inteligencia para dosificar, para hidratarse, para no destruir mi ya frágil humanidad, para evitar los grillos que hormiguean en la mente cuando vas solo en la ruta, para vencer la adversidad cualquiera sea la forma en que esta se manifieste, para sobreponerse a cualquier dolor físico que seguro se presentara, ello – como lo señala nuestro entrenador- es inevitable, la diferencia en ese punto solo la haces tú … en fin …. En lo personal mi mayor temor es la incertidumbre que me genera el saber si tendré la fuerza mental para asumir que no me demorare dos ó tres horas … sino muy por el contrario que estaré tal vez poco más de cuatro horas corriendo y si bien la maquina puede dar ya que para eso la estamos preparando … ¿será la mente capaz de tamaño esfuerzo? … así las cosas cada vez comprendo mas el poder de los que te gritan cuando vas corriendo, son pequeñas inyecciones de adrenalina que te motivan e impulsan a seguir a seguir hasta ver la meta y cruzarla, ni hablar de mis compañeros de equipos… solo agregar que son un 10 y que si lo logro parte de este triunfo también será por ellos y toda esa energía que generosamente te traspasan, antes durante y después.

Por ello es que he llamado a este blog " cerrando ciclos " , SI porque a fines del 2008 me propuse hacer esta distancia la que prontamente tuve que abandonar como consecuencia de una seguidillas de lesiones, hoy mas sereno y maduro en estas lides, confieso la desazón que ello me origino, sin embargo cuando el cuerpo no quiere … simplemente no quiere … si algo he aprendido en todo este tiempo es que cuerpo y mente deben resonar , si ello no ocurre resulta difícil cerrar ciclos .

Que lejano se ven los días cuando con gran esfuerzo lograba hacer esos tres kilómetros que se llevaban todo de mi, y como la perseverancia, la dedicación , el estudio, los cuidados que le brindo a mi débil humanidad me han llevado paulatinamente a distancia cada vez mayores que ciertamente me parecían imposible y que hoy luego de realizadas no puedo sino maravillarme de lo que uno es capaz de efectuar… largo ha sido el peregrinar , pero los ciclos se van cerrando , cada uno ha constituido por sí mismo un objetivo personal importante, cada uno ha sido y será una historia que contar en el futuro, créanme que es muy gratificante pasar por una calle de mi ciudad y expresar " si yo corría o corro por aquí", siento que ya soy(somos) diferente del resto de los mortales, capturo la admiración de mis amigos que siempre han estado allí dándome su aliento, de mis subordinados en el trabajo, de mis alumnos, en fin de todo el que quiera escucharnos …. ¿ o no, señores y señoras ?

Mis hijos me señalan que me he convertido en un adicto a las endorfinas, quisiera pensar que más bien me he ido convirtiendo en un cerrador de mis ciclos, en un generador de objetivos, en una persona que no va dejando cuentas pendientes y esta es una de ellas. Lo que ocurra después es harina de otro costal, hoy no vale ni siquiera pensar en ello…solo puedo afirmar que conociendo a nuestro entrenador es muy probable que finalizada esta etapa, la exigencia respecto de fijarme un nuevo objetivo vendrá de él, debo sin embargo reconocer que este ya lo estoy pensando, porque tal como lo dice mi buen amigo Daniel " Rody llega… mas allá de los tiempos y los dolores y yo estaré - como mudo testigo - en la meta para verlo cruzar y disfrutar ese maravilloso momento que espero vivir en el maratón de New York". … y por cierto que si llego una nueva sera necesario fijar ... a lo menos así lo creo.

Por ahora solo queda seguir entrenando… Buenos Aires nos espera