Te volveré a encontrar

Papito:

Hace ya un año que partiste y las ganas de volver en el tiempo son enormes.Todo el tiempo que compartimos juntos te amé y te amo. Por ese apego, tu ausencia en ocasiones aún me hace conectar con el dolor, la pena y la rabia...

Acepto tu derecho a partir, a tu hora y sin mi consentimiento. Acepto mi pena al extrañarte, al no tener tu presencia y el enojo inexplicable de los primeros tiempos sin ti, porque al partir me sentí abandonado, sentí que me arrebataron de golpe un pedazo del corazón.

Tengo super claro que en nuestra experiencia juntos, en más de una ocasión te di un dolor de cabeza, uff jajajaja... pero me tranquiliza saber que fui honesto y transparente en cada instante y hoy me puedo despedir sin quedarme con culpas del pasado, aunque con ganas de haberte dicho muchas más veces todo lo que te quería.

Te extraño un montón y me parece tremendamente difícil poder vivir sin tu presencia, sin tus locuras, tu  vitalidad, tu inquietud y tu sabiduría, que en estos momentos ni imaginas como me hace falta. Por todo el amor que te tuve y te tengo, es que un millón de veces llegué a necesitarte; y ahora quiero aprender a desapegarme, a soltar, a amarte sin necesitar tenerte a mi lado; quiero que mi amor no muera sino que madure y crezca. Y aunque sienta que te necesito y que quiero que estés aquí, también siento que quiero avanzar, que mi vida tiene su autonomía y su propio equilibrio y que cuento con personas maravillosas a mi lado para apoyarme y disfrutar.

Decidiste partir y aquí estoy para decirte hasta luego. Nada ganaría con rehusarme o convencerme que no te fuiste. Me siento con el derecho y la motivación de seguir mi vida, de levantarme como tu muchas veces lo hiciste, con calma, vitalidad y sobre todo optimismo.

Aunque una parte de mi energía se fue con tu partida, no quiero morir contigo, porque tú no ganarías nada, y no te mostraría con eso ni el amor que siento por ti, ni los aprendizajes que incorporé, ni la energía que también recibí de ti. Por eso te digo hasta luego, ya que esa energía tuya que quedó en mi y la mía que partió contigo, me hace sentir que continuamos conectados, tal vez a través de otros canales... y es hasta luego porque se han abierto portales a mi alrededor hoy, que me han mostrado que los vínculos potentes se mueven más allá de esta dimensión y estoy seguro que te volveré a encontrar.

Al despedirme hoy de ti papito lloro triste y apenado, y lo acepto y me lo permito, porque así lo siento!... pero, y aunque me es difícil decírtelo, sé que más adelante volveré a vivir el gozo de la vida, a aprovechar las oportunidades del día a día, la presencia de los que todavía están… llevando siempre conmigo tu recuerdo y también tu compañía... compañía que noto cada vez que llego a un lugar y me canta un pajaro.

Te amo siempre viejito querido.

Maxi