POR QUE ME GUSTA CORRER Quiero con el permiso de quien me lee filosofar si así lo podemos decir respecto de mis motivaciones o las razones que me llevan a correr al punto de poner muchas veces en riesgo mi frágil humanidad.
Corro sin importar en qué lugar llegare, lo que importa es llegar.
Corro porque disfruto del paisaje cuando lo hago.
Corro porque todo lo previo es un ritual que no tiene igual.
Porque no hay nada mejor que sentir la adrenalina al momento de partir y al llegar en una competencia.
Porque soy capaz de sacar una fuerza interior desconocida cuando ya crees no dar más.
Corro porque siempre que lo hago existe un pequeño dolor en alguna parte de mi cuerpo y no es masoquismo, por el contrario es solo una demostración de la fragilidad humana que siempre debemos tener presente ya que no hay nada más hermoso y perfecto que nuestro cuerpo.
Corro porque adoro el silencio y en el camino asfaltado o de tierra siempre soy yo y mis pensamientos.
Porque no importa si hace frió o calor, si es noche o es día, si llueve o nieva, porque no importa nada cuando corres.
Corro porque ello implica desafíos de vida y no hay nada más agradable al finalizar una carrera que decir "lo logre"
Porque es un triunfo mío y solo mío, aún cuando son muchos los que están apoyándote para que lo consigas
Porque aprendí que mientras lo haces nunca se debe mirar hacia atrás, primero porque es muy probable que te saques la cresta y luego porque no tiene sentido el hacerlo ya que ello solo puede generarte angustias por lo que no hiciste o dejaste de hacer, o si lo prefieres el correr es una ventana permanente al futuro.
Corro porque no hay nada más gratificante que sentir el sudor corriendo por todo tu cuerpo
Porque he aprendido a conocer mis capacidades físicas lo que me permite seguir corriendo y parar cuando debo parar.
Porque cuando lo hago y hago esas grandes distancia me siento como un superhombre capaz de conseguir cualquier imposible.
Corro porque nadie, ni nada me apura, solo yo imprimo velocidad.
Porque el camino y yo somos uno, y cuando ello ocurre se detiene el tiempo y no existen externalidades más que las que yo deseo que existan.
Corro porque me fascinan los primeros rayos del sol o ver la luna salir.Porque los aromas de la naturaleza toda se cruzan ante cada paso que doy.
Porque siempre la justificación perfecta que me permite sin resentimiento de culpa comprarme lo ultimo en zapatillas o ese monitor o la tenida de invierno.
Porque no hay nada más gratificante que pasar por un charco de agua y por este mojar tus ya acalorados pies.
Porque siento que soy un poco distinto respecto del común de los mortales.
Porque es en esos momentos cuando mi mente entra en sintonía con el universo generando una resonancia que me permite mirar la vida con ojos de hombre bueno.
Corro porque amo mi familia, mis amigos, la vida y quiero no solo estar bien para mí sino también para ellos.
Corro porque añoro ese café y conversación luego de un buen entrenamiento
Corro porque odio subir cerros, lo que per-se constituye una tremenda proeza que me da tema para ponerme de ejemplo.
Porque esos farklet que me dejan extenuado son mi más fiel compromiso con los propósitos que me he fijado en este deporte.
Porque no hay nada más agradable luego de el esfuerzo realizado que hacer una buena elongación de cada una de las partes de tu cuerpo
Porque no hay nada más sabroso que un isotónico, o las naranjas al finalizar una competencia… ni hablar de los plátanos… simplemente exquisitos.
Corro porque amo la música y ver como mi cuerpo, mi respiración fluyen a los mismos ritmos de los que voy escuchando.
Corro porque el correr me da la posibilidad de conocer a otros locos y locas maravillosos.
Porque me lleva a lugares que de otra manera difícilmente iría, es la justa y precisa justificación para viajar.
Corro porque te amo, porque eres mi motivación eterna y permanente, porque eres la luz que me guía y anima, porque si no corres tú, lo hago yo por ti.
Corro, porque cuando corro sé que soy tu preocupación permanente… aunque sé que siempre lo soy… cuando corro sé que lo soy más. En definitiva, corro porque quiero correr porque espero que allí siempre exista un camino abierto, que me abrace, cobije, me lleve a ti y que en el tiempo se funda con los cielos, que estoy seguro me ofrecerá nuevos caminos que correr.
HASTA LA PROXIMA
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